Vodafone se convierte en patrocinador de Giants Gaming tras la salida de G2 Esports de España

Hace días G2 Esports nos sorprendía con el cierre de su división española, G2 Vodafone, haciendo desaparecer a los equipos que operaban bajo este nombre en varias disciplinas y dejando a la operadora convergente sin una organización a la que patrocinar.

Poco después los rumores se extendían afirmando que la compañía estaba buscando un nuevo equipo y el nombre que surgía en casi cada ocasión era el mismo: Giants Gaming, una organización con diez años de solera y magnífica trayectoria competitiva que podría dar a Vodafone el aliciente extra de una amistosa rivalidad contra el equipo patrocinado por su principal competidor, Movistar Riders.

Finalmente la predicción se ha cumplido y Vodafone ha anunciado esta mañana su apuesta por Giants Gaming en una alianza que según los representantes del equipo malagueño revolucionará los eSports en España. Los más de 35 fichajes que participan en competiciones nacionales de League of Legends, Clash Royale, FIFA, Call of Duty o HearthStone pasarán ahora a competir bajo la bandera de Vodafone Giants y las miras del equipo podrían extenderse a las series Europeas e incluso al anunciado sistema de franquicias de la nueva LCS.

Además del patrocinio, Vodafone continuará con su apuesta por los eSports en forma de elaboración de contenidos, que distribuirá a través de sus canales en plataformas digitales y en los que participarán a partir de ahora como invitados los jugadores de Giants. Uno de los primeros programas que han destacado durante la presentación enfrentará el próximo 24 de abril al dos veces campeón del mundo de FIFA Alfonso Ramos con una audiencia en directo vía Twitch para contestar a todas sus preguntas.

Durante la presentación de la alianza no ha faltado lo que se podría considerar una puyita dirigida a la apuesta de Movistar por los eSports, al mencionar desde la operadora que reconocen la presencia de la audiencia de los eSports en espacios de internet como YouTube o Twitch, por lo que no se plantearían "obligarles a ver la televisión para seguir sus contenidos".
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