Este fin de semana se ha constituido como uno de los más animados del año para los fans de League of Legends, que han tenido la oportunidad de disfrutar con las ajustadas semifinales de las principales ligas europea y norteamericana, asisten sin duda esta tarde a la Gran Final de la Superliga Orange entre MAD Lions y Vodafone Giants y anticipan la inminente llegada del Worlds.
En el escenario europeo y con el objetivo de visitar Madrid el próximo domingo, se enfrentaban el viernes los franceses de Vitality, uno de los equipos que más "de tapadillo" ha ejecutado una estupenda temporada y los alemanes de Schalke 04, probablemente el equipo de más éxito de los asociados a un club deportivo con el permiso de los chinos LGD. Ambos equipos desempeñaron un papel relativamente parecido durante la temporada regular y llegaban a su semifinal prometiendo una exhibición de gran nivel.
En el primer juego los franceses se apoyaron (como durante casi toda la temporada) en el paso decisivo de su jungla Mateusz Kikis Szkudlarek, candidato no suficientemente apreciado en la selección del quinteto ideal de la liga, para adelantarse en los primeros movimientos. Sin embargo, tras conseguir un Heraldo de la Grieta, el quinteto desaprovecharía su impulso en una jugada que terminó con múltiples bajas y la obtención de un decisivo Nashor por parte de sus rivales.
El segundo partido resultó bastante más rápido y preocupante para los franceses, que se encontraban casi desde el primer momento sin opciones para hacer frente a los contrarios en la jungla y la calle central. Los enfrentamientos de grupo se decidían invariablemente hacia el lado azul y la estrategia de Schalke les valió una rápida y (para sus rivales) desmoralizadora victoria.
La recuperación parcial llegaría en la tercera partida, con el paso a finales en juego y unos Vitality poco convencidos de ceder tan fácilmente todo el trabajo realizado hasta ahora. De nuevo apoyándose en Kikis y su extraordinario manejo de Kindred, los galos se aseguraron de defender apropiadamente todos los carriles y reunirse con su jungla en los momentos clave para unas batallas de equipo que sin ser perfectas proporcionarían el resultado deseado.
Dicen que no es una buena idea cambiar lo que funciona, por lo que en Vitality decidieron iniciar el cuarto encuentro con el mismo desarrollo que el anterior: cubriendo a Kikis y defendiendo con solidez los carriles exteriores. Sin embargo, en S04 habían tenido la oportunidad de hacerse a la idea de esta aproximación y para su segundo "punto de partido" desplegaron toda su intensidad en el carril central, aprovechando el magnífico estado de forma del popular Nukeduck para controlar los avances enemigos.
El primer Nashor caía del lado alemán sin demasiada dificultad y la defensa gala comenzaba a mostrar grietas, sin embargo el equipo pudo sobreponerse e incluso igualar la cuenta de gusanos con su propia aproximación unos minutos después. La ventaja económica de Schalke se reveló intratable, proporcionándoles la diferencia de progresos suficiente para una inicialmente tímida aproximación en la calle central que concluyó las esperanzas de Vitality de cara a la final.
En el escenario europeo y con el objetivo de visitar Madrid el próximo domingo, se enfrentaban el viernes los franceses de Vitality, uno de los equipos que más "de tapadillo" ha ejecutado una estupenda temporada y los alemanes de Schalke 04, probablemente el equipo de más éxito de los asociados a un club deportivo con el permiso de los chinos LGD. Ambos equipos desempeñaron un papel relativamente parecido durante la temporada regular y llegaban a su semifinal prometiendo una exhibición de gran nivel.
En el primer juego los franceses se apoyaron (como durante casi toda la temporada) en el paso decisivo de su jungla Mateusz Kikis Szkudlarek, candidato no suficientemente apreciado en la selección del quinteto ideal de la liga, para adelantarse en los primeros movimientos. Sin embargo, tras conseguir un Heraldo de la Grieta, el quinteto desaprovecharía su impulso en una jugada que terminó con múltiples bajas y la obtención de un decisivo Nashor por parte de sus rivales.
El segundo partido resultó bastante más rápido y preocupante para los franceses, que se encontraban casi desde el primer momento sin opciones para hacer frente a los contrarios en la jungla y la calle central. Los enfrentamientos de grupo se decidían invariablemente hacia el lado azul y la estrategia de Schalke les valió una rápida y (para sus rivales) desmoralizadora victoria.
La recuperación parcial llegaría en la tercera partida, con el paso a finales en juego y unos Vitality poco convencidos de ceder tan fácilmente todo el trabajo realizado hasta ahora. De nuevo apoyándose en Kikis y su extraordinario manejo de Kindred, los galos se aseguraron de defender apropiadamente todos los carriles y reunirse con su jungla en los momentos clave para unas batallas de equipo que sin ser perfectas proporcionarían el resultado deseado.
Dicen que no es una buena idea cambiar lo que funciona, por lo que en Vitality decidieron iniciar el cuarto encuentro con el mismo desarrollo que el anterior: cubriendo a Kikis y defendiendo con solidez los carriles exteriores. Sin embargo, en S04 habían tenido la oportunidad de hacerse a la idea de esta aproximación y para su segundo "punto de partido" desplegaron toda su intensidad en el carril central, aprovechando el magnífico estado de forma del popular Nukeduck para controlar los avances enemigos.
El primer Nashor caía del lado alemán sin demasiada dificultad y la defensa gala comenzaba a mostrar grietas, sin embargo el equipo pudo sobreponerse e incluso igualar la cuenta de gusanos con su propia aproximación unos minutos después. La ventaja económica de Schalke se reveló intratable, proporcionándoles la diferencia de progresos suficiente para una inicialmente tímida aproximación en la calle central que concluyó las esperanzas de Vitality de cara a la final.