Si las primeras semifinales de la Overwatch League no dejaban a nadie indiferente, al público solo le esperaban más sorpresas con el enfrentamiento al día siguiente de los Philadelphia Fusion contra los New York Excelsior, un club que prácticamente todos situaban en la final de este fin de semana frente a su público local en el Barclays Center.
Los seguidores neoyorquinos tendrán que conformarse con animar a los Spitfires o a un equipo que partiendo de una posición claramente mediocre en esta cuarta fase se hizo con su puesto en la final en un encuentro ajustado pero con un resultado bien merecido.
La entereza de los Excelsior se había visto sacudida por la victoria de los Fusion el miércoles, pero a pesar de ello no parece que el entrenador y sus jugadores fueses capaces de reaccionar ante un equipo que ha aprovechado como ninguno los últimos cambios de meta. Aunque el partido se disputó con una igualdad mucho mayor que la del anterior encuentro, las mejores cifras individuales de los jugadores de Philadelphia y su mayor adaptabilidad sirvieron para darles la iniciativa en casi todo momento.
Si en Junkertown las predicciones todavía se mostraban difíciles de decidir y Lijiang Tower sirvió para que los representantes de Nueva York demostrasen su juego en equipo y la barrera insalvable que sus snipers han supuesto durante toda la temporada, en King's Row las tornas cambiaban y los Fusion se hacían con el punto con un dominio casi absoluto.
En Hanamura los Excelsior mantenían la compostura y se recuperaban del primer tanto de sus rivales con un juego muy sólido y coordinado que se apoyó especialmente en la Ana de JJoNak para forzar un último encuentro en Dorado, un mapa que dentro de los buenos resultados generales del equipo no destaca como su mejor escenario de victoria.
Con una lucha aparentemente caótica (incluso para una partida de máximo nivel de Overwatch) ambos equipos pusieron todo el poderío individual de sus campeones en juego, resultando en una carrera por encontrar la combinación más favorable bajo las condiciones más estrictas de tiempo y cobertura de fuego. Finalmente las elecciones de los Fusion se demostraron más acertadas y el equipo se impuso en el último minuto frente a la desesperada táctica del triple tanque y triple apoyo de sus rivales.
Con el emparejamiento listo para la etapa definitiva de este fin de semana, la Overwatch League se prepara para deleitar a su afición con un espectáculo proporcional al despliegue que hemos podido ver durante esta primera temporada. Además de la muy superior cantidad de público que acogerá el Barclays Center con respecto a la Blizzard Arena y el esperable seguimiento desde el canal oficial en Twitch, la liga sumará espectadores para su final con la inédita emisión del encuentro a través de la cadena de deportes generalista ESPN.
Los seguidores neoyorquinos tendrán que conformarse con animar a los Spitfires o a un equipo que partiendo de una posición claramente mediocre en esta cuarta fase se hizo con su puesto en la final en un encuentro ajustado pero con un resultado bien merecido.
La entereza de los Excelsior se había visto sacudida por la victoria de los Fusion el miércoles, pero a pesar de ello no parece que el entrenador y sus jugadores fueses capaces de reaccionar ante un equipo que ha aprovechado como ninguno los últimos cambios de meta. Aunque el partido se disputó con una igualdad mucho mayor que la del anterior encuentro, las mejores cifras individuales de los jugadores de Philadelphia y su mayor adaptabilidad sirvieron para darles la iniciativa en casi todo momento.
Si en Junkertown las predicciones todavía se mostraban difíciles de decidir y Lijiang Tower sirvió para que los representantes de Nueva York demostrasen su juego en equipo y la barrera insalvable que sus snipers han supuesto durante toda la temporada, en King's Row las tornas cambiaban y los Fusion se hacían con el punto con un dominio casi absoluto.
En Hanamura los Excelsior mantenían la compostura y se recuperaban del primer tanto de sus rivales con un juego muy sólido y coordinado que se apoyó especialmente en la Ana de JJoNak para forzar un último encuentro en Dorado, un mapa que dentro de los buenos resultados generales del equipo no destaca como su mejor escenario de victoria.
Con una lucha aparentemente caótica (incluso para una partida de máximo nivel de Overwatch) ambos equipos pusieron todo el poderío individual de sus campeones en juego, resultando en una carrera por encontrar la combinación más favorable bajo las condiciones más estrictas de tiempo y cobertura de fuego. Finalmente las elecciones de los Fusion se demostraron más acertadas y el equipo se impuso en el último minuto frente a la desesperada táctica del triple tanque y triple apoyo de sus rivales.
Con el emparejamiento listo para la etapa definitiva de este fin de semana, la Overwatch League se prepara para deleitar a su afición con un espectáculo proporcional al despliegue que hemos podido ver durante esta primera temporada. Además de la muy superior cantidad de público que acogerá el Barclays Center con respecto a la Blizzard Arena y el esperable seguimiento desde el canal oficial en Twitch, la liga sumará espectadores para su final con la inédita emisión del encuentro a través de la cadena de deportes generalista ESPN.